


Comprender el masculinismo y su impacto en el género y la sexualidad
En el contexto del género y la sexualidad, "masculinista" se refiere a un conjunto de creencias, valores y actitudes que enfatizan las cualidades masculinas tradicionales como la fuerza, la asertividad y el dominio. El masculinismo puede verse como una forma de patriarcado, donde los hombres son considerados el género dominante y se espera que las mujeres se ajusten a los roles femeninos tradicionales. Las ideologías masculinistas pueden manifestarse de varias maneras, entre ellas: 1. Roles de género: Se espera que los hombres sean fuertes, asertivos e independientes, mientras que se espera que las mujeres sean cariñosas, sumisas y dependientes.
2. Dinámica de poder: A menudo se considera que los hombres son los principales sostén de la familia y quienes toman las decisiones, mientras que se espera que las mujeres sean cuidadoras y amas de casa.
3. Socialización: Los niños son socializados para ser competitivos, agresivos y emocionalmente reprimidos, mientras que las niñas son socializadas para ser cariñosas, sumisas y emocionales.
4. Lenguaje: El lenguaje masculino se utiliza a menudo para describir las experiencias y los logros de los hombres, mientras que el lenguaje femenino se utiliza para describir las experiencias y los logros de las mujeres.
5. Educación: A menudo se anima a los niños a seguir carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), mientras que a las niñas se les suele disuadir de seguir estos campos.
6. Representación en los medios: los hombres suelen ser representados como personajes principales en películas, programas de televisión y otros medios, mientras que las mujeres suelen quedar relegadas a roles secundarios o roles de género estereotipados.
7. Cultura del lugar de trabajo: los hombres suelen ser privilegiados en el lugar de trabajo, con salarios más altos, más oportunidades de avance y mayor autoridad y respeto... Es importante señalar que no todos los hombres suscriben ideologías masculinistas y muchos trabajan activamente contra ellas. Además, el género es una construcción social y los individuos de cualquier género pueden exhibir cualidades tanto tradicionalmente masculinas como femeninas. Sin embargo, comprender las formas en que opera el masculinismo en la sociedad puede ayudarnos a desafiar estas creencias dañinas y crear un mundo más equitativo e inclusivo para todos.



