Comprensión de la combustión: tipos de materiales y procesos combustibles

La combustión es una reacción química entre un combustible y un oxidante que libera energía en forma de calor y luz. El combustible puede ser sólido, líquido o gaseoso y el oxidante suele ser oxígeno en el aire. Cuando el combustible y el oxidante se combinan y encienden, reaccionan para producir dióxido de carbono, vapor de agua y calor.

Ejemplos de materiales combustibles incluyen:

* Madera, que es un combustible común para incendios y fogatas
* Gasolina, que se utiliza como combustible para automóviles y otros vehículos
* Gas natural, que es un combustible fósil que se usa comúnmente para calentar y cocinar
* Propano, que es un combustible líquido que a menudo se usa para barbacoas y otros aparatos al aire libre
* Carbón vegetal, que se elabora a partir de madera quemada y puede usarse como combustible para parrillas y otros dispositivos para cocinar. La combustión también puede ocurrir en materiales no inflamables, como plásticos y otros materiales sintéticos, mediante un proceso llamado pirólisis. En este proceso, el material se calienta a altas temperaturas sin encenderse, lo que provoca la liberación de gases y líquidos volátiles.