Entrada: la cantidad de agua que ingresa a los cuerpos de agua y sus impactos
El flujo de entrada se refiere a la cantidad de agua que ingresa a un cuerpo de agua, como un río, lago u océano, desde diversas fuentes. Puede provenir de una variedad de fuentes, que incluyen:
1. Escorrentía superficial: Agua que fluye sobre la tierra y hacia una masa de agua después de una lluvia o deshielo.
2. Afluencia de aguas subterráneas: Agua que se filtra a una masa de agua procedente de acuíferos subterráneos.
3. Entrada de aguas pluviales: agua que ingresa a una masa de agua durante fuertes tormentas o inundaciones.
4. Entrada de aguas residuales: agua que está contaminada con desechos humanos, contaminantes industriales u otras sustancias nocivas y ingresa a un cuerpo de agua a través de sistemas de alcantarillado u otras fuentes. La entrada puede tener impactos tanto positivos como negativos en el medio ambiente y las comunidades humanas. Por ejemplo, una afluencia excesiva puede provocar inundaciones, erosión y contaminación del agua, mientras que una afluencia insuficiente puede provocar sequías, reducción de la calidad del agua e impactos negativos en los ecosistemas acuáticos. Comprender las fuentes y las cantidades de afluencia es importante para gestionar los recursos hídricos, proteger el medio ambiente y garantizar la salud y la seguridad públicas.