


Los peligros de la excesiva mansedumbre: comprender los riesgos de ser demasiado sumiso
La excesiva mansedumbre es un término utilizado para describir a alguien que es excesivamente manso o sumiso hasta el punto de ser débil o ineficaz. También puede referirse a alguien que está demasiado dispuesto a comprometer o sacrificar sus propias necesidades y deseos por el bien de los demás. En algunos casos, la mansedumbre excesiva puede verse como un rasgo negativo, ya que puede conducir a la explotación o el maltrato por parte de otros que toman ventaja de la voluntad de la persona de agradar. También puede impedir que la persona se defienda o afirme sus propias necesidades y límites... Por otro lado, ser manso no significa necesariamente que alguien sea débil o ineficaz. De hecho, muchas personas que se consideran mansas suelen ser muy fuertes y resistentes, pero eligen expresar su fuerza de una manera más sutil o modesta.... Es importante tener en cuenta que ser demasiado manso puede ser un comportamiento aprendido, y puede ser como resultado de experiencias pasadas o de la educación. Si descubre que su tendencia a la dócilidad excesiva está causando problemas en su vida, puede ser útil buscar terapia o asesoramiento para trabajar en el desarrollo de su asertividad y establecer límites saludables.



