No condenado al fracaso: el poder de la esperanza y el optimismo para superar los desafíos

En el contexto de la oración que proporcionó, "no condenado" probablemente signifique "no condenado" o "no destinado a fracasar". La palabra "condenado" en este contexto sugiere que algo está destinado a suceder, a menudo en un sentido negativo. Entonces, "no condenado" implicaría que algo no está predeterminado a fallar o no tener éxito. Por ejemplo, si alguien estaba luchando con una tarea difícil y sentía que estaba condenado a fallar, podría decir que no estaba condenado si de repente se le ocurría. encontrar una solución o encontrar una manera de tener éxito. Es una forma de expresar esperanza u optimismo de que las cosas saldrán bien, a pesar de las dificultades o desafíos iniciales.