


Positrones: antipartículas con potenciales aplicaciones en medicina e industria
Los positrones son antipartículas de electrones. Tienen la misma masa que los electrones, pero tienen carga positiva en lugar de carga negativa. Los positrones se forman cuando partículas de alta energía chocan y crean pares de partículas y antipartículas. En este contexto, "positrón" se refiere a la antipartícula de un electrón. Los positrones fueron descubiertos por primera vez en 1932 por el físico Carl Anderson, quien los observó en los rayos cósmicos. Desde entonces, los positrones se han estudiado extensamente en aceleradores de partículas y tienen muchas aplicaciones prácticas en la medicina y la industria. Una de las propiedades más interesantes de los positrones es su capacidad de aniquilarse con electrones, lo que da como resultado la creación de rayos gamma. Este proceso se conoce como "aniquilación positrón-electrón". Cuando un positrón choca con un electrón, ambos desaparecen y crean una explosión de energía en forma de rayos gamma. Este proceso es importante en muchas áreas de la física y tiene muchas aplicaciones prácticas. Los positrones también tienen aplicaciones potenciales en medicina, donde pueden usarse para destruir células cancerosas. En este contexto, los positrones se utilizan para crear un tipo de radioterapia conocida como "tomografía por emisión de positrones" (PET). En las exploraciones PET, se inyecta al paciente un marcador radiactivo que emite positrones, que luego se aniquilan con electrones en el cuerpo y crean rayos gamma que pueden ser detectados por una cámara especial. Esto permite a los médicos visualizar la ubicación de las células cancerosas y atacarlas con radioterapia. En resumen, los positrones son antipartículas de electrones que tienen muchas propiedades interesantes y aplicaciones potenciales en la medicina y la industria. Fueron descubiertos por primera vez en 1932 y desde entonces han sido estudiados exhaustivamente.



